Pese a lo abultado del marcador, los locales no lo tuvieron fácil ante un rival que se adelantó en el marcador, con un gol de Ashley Westwood (13'), al materializar un golpe franco directo desde la frontal del área.
El United remontó con dos goles de Wayne Rooney (20' y pen. 45'), el segundo un penal cometido sobre Juan Mata (57'), el centrocampista
español que logró el tercero antes de la sentencia definitiva del mexicano Javier "Chicharito" Hernández en la prolongación (91').
Con esta victoria, el equipo que dirige David Moyes, que
tuvo que ver como unos aficionados pidieron su cese en una banderola
exhibida desde una avioneta que sobrevoló Old Trafford, suma 54 puntos y
se coloca a dos del Tottenham y tres del Everton, con los que disputará
las plazas de Europa League.
Con su doblete de hoy, Rooney se convirtió en el cuarto máximo
goleador en la historia de la Premier League, con 171 goles, solo por
detrás del francés Thierry Henry (175) y los ingleses Andrew Cole (187) y
Alan Shearer (260).
A pesar de las espectaculares cifras de una de las estrellas del
equipo, el United no puede ocultar la profunda crisis que atraviesa:
esta temporada ha perdido más partidos en casa (6) que en las tres
anteriores campañas juntas (5).
Ante esa situación, el encuentro de este sábado llegaba marcado por la iniciativa de un grupo de aficionados que contrataron una avioneta publicitaria para que sobrevolara Old Trafford con una pancarta contra Moyes. "Wrong One. Moyes Out" ("Equivocado. Moyes fuera"), rezaban las grandes letras rojas de un anuncio que acabó teniendo el efecto contrario al esperado.
Cuando la avioneta pasó por encima del "Teatro de los sueños", las gradas estallaron en abucheos hacia la aeronave y en un aplauso en apoyo del técnico escocés, que la próxima semana dirigirá al equipo en uno de los duelos más comprometidos de la temporada, los cuartos de final de la Champions ante el Bayern Múnich.A pesar del balón de oxígeno que concedieron los aficionados al equipo con el aplauso a Moyes, los Diablos Rojos comenzaron el partido del peor modo posible, recibiendo un gol del Aston Villa, obra del inglés Ashley Westwood a balón parado.
Con el holandés Robin Van Persie en la enfermería por una lesión muscular, el encargado de echarse al equipo a la espalda fue, una vez más, Rooney.
El líder de la selección inglesa peinó de cabeza un balón centrado por Kagawa que se coló rozando el palo derecho de la meta del portero estadounidense Brad Guzan, y cuajó la remontada desde el punto de penal instantes antes del descanso.
El United mostraba la actitud de sus mejores partidos y saltó al césped en la segunda parte dispuesto a marcar cuanto antes su tercer gol para lograr definitivamente la tranquilidad.
Fue Mata quien se aprovechó de una confusa jugada en el área del Aston Villa para recuperar un balón que había rebotado en un defensa y descerrajar un tiro raso hacia la izquierda al que Guzan no reaccionó hasta que fue demasiado tarde para detenerlo.
Con el tiempo cumplido, Chicharito, que acababa de salir del banquillo, volvió a demostrar que está en forma al rematar en el segundo palo un ajustado centro de Januzaj y subir al marcador el cuarto gol de para los locales.
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