El Schalke empató hoy a dos en casa ante el Bayer Leverkusen tras
remontar un 0-2 en contra y poniendo al equipo de las aspirinas el
término del partido cerca de la derrota.
El empate hace que los dos equipos mantengan sus posiciones (el
Leverkusen es tercero y el Schalke cuarto) y que la lucha por la
clasificación a la Liga de Campeones siga abierta.
El Leverkusen se fue en ventaja en el minuto 31 con un gol de cabeza
del capitán Simon Rolfes en una jugada polémica puesto que en el centro
de André Schürrle, que precedió al gol, había un jugador del Schalke,
Ciprian Marica, lesionado en el área.
Los jugadores del Leverkusen optaron por seguir la jugada, la lesión
de Marica se había producido justo antes al chocar con Steffan Kiessling
en la disputa por un balón aéreo, lo que desembocó en el gol de la
ventaja, en lugar de sacar el balón del campo para que el jugador
contrario fuera atendido.
Ambos equipos habían tenido ocasiones de gol, el Leverkusen dos del
español Dani Carvajal, una de André Schürrle y una de Sidney Sam y el
Schalke una en los pies de Julian Draxler y otra del brasileño
Raffael.
Sin embargo, el equipo de las aspirinas, pese a jugar a domicilio,
llevaba la iniciativa y hacía más por el fútbol de ataque mientras el
Schalke apostaba ante todo a jugadas de contragolpe.
El segundo gol llegó en el minuto 58, cuando el checo Michael Kadlec
lanzó una falta desde la banda derecha y Kiessling alcanzó a tocar el
balón con la cabeza descolocando por completo al meta Timo Hildebrand.
Un minuto antes, Draxler había desperdiciado una gran ocasión para
lograr el empate al rematar por encima desde excelente posición dentro
del área.
Tras el gol de Kiessling el partido parecía sentenciado a favor del
equipo que había llevado la mejor parte del compromiso pero en el minuto
71 un error del meta Bernd Leno hizo posible el descuento del Schalke y
cambio la historia del partido.
Leno sólo pudo detener a medias un disparo desde fuera del área del
brasileño Raffael y el balón cayó a los pies del finlandés Teemu Pukki (71')
que definió sin problemas desde corta distancia.
El descuento le dió al Schalke un segundo aire y el club de
Gelsenkirchen se lanzó a buscar el empate que encontró en el minuto 87,
cuando Raffael convirtió un penal después de que Topral derribara a
Pukki dentro del área. Toprak, además, fue expulsado en esa acción con lo que en los minutos
finales del compromiso el Leverkusen jugó con diez hombres.
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