Independiente no pudo dejar atrás una semana llena de problemas tras
conseguir un pobre empate de 1-1 ante Unión de Santa Fe en Avellaneda
por la novena fecha del torneo Final del fútbol argentino, con la
igualdad, el equipo de Américo Rubén Gallego se hunde en zona de
descenso.
Independiente no puede tomar aire, luego de la derrota ante All Boys
en la última fecha, hubo rumores de que Gallego dejaría el cargo de
entrenador, además, en la semana los jugadores fueron insultados y
amenazados por un grupo de hinchas tras un entrenamiento, tras este
flojo resultado, todo indica que el ambiente empeorará.
El juvenil delantero paraguayo Adrián Fernández (40') hizo el gol que para los Diablos Rojos en su momento fue un
paliativo y les sirvió para ganar el parcial.
Y cuando daba
la impresión de que el conjunto que dirigía Américo Gallego tenía la
situación controlada, los santafesinos lograron la igualdad en el minuto
35 de la segunda parte, y eso ocurrió porque el uruguayo Brahian Aleman
picó vacío y cabeceó de un modo certero.
Con este
resultado, los dos elencos siguen en zona de descenso y cada vez tienen
menos chances de obtener la salvación, a ambos le quedan diez episodios
para tratar de revertir la situación.
El primer segmento
fue entretenido, muy emocionante por lo que había en juego y por el
desarrollo, a los 24', Fausto Montero habilitó a Pablo Magnín, quien mano a mano ante
Diego Rodríguez definió sin justeza hacia el palo izquierdo, a los 25',
hubo un error del colombiano Fabián Vargas que le dio otra chance al
mismo delantero, quien de cara al gol no logró batir al guardavalla.
Independiente,
descompensado, apenas se las ingeniaba para llegar al arco contrario
con remates desde la media distancia, pero consiguió abrir el marcador a
los 40 minutos, cuando el capitán Daniel Montenegro desbordó y tiró un
centro desde la derecha que capitalizó Fernández de atropellada.
En
esa escena clave la pelota dio en el brazo izquierdo del guaraní antes
de que disparara con eficacia, pero de ninguna manera el joven artillero
intentó tomar ventaja.
El 1-0 le permitió al local salir
con otro aplomo para afrontar la segunda parte y, si bien fue
retrocediendo en el campo de juego en la medida que pasaban los minutos,
dando lugar a algunos disparos imperfectos desde la media distancia,
estaba justificando la victoria provisoria.
Tanto había
sido así que Víctor Zapata estuvo a punto de marcar lo que huibiera sido
el 2-0, a los 22 minutos, con un tiro que pegó en el travesaño y cuando el numeroso público se preparaba para
un gran festejo, en un avance que parecía intrascendente, Unión alcanzó
el empate, y eso sucedió cuando menos lo merecía.
Desde la
izquierda llegó un pase al claro visionario y Aleman picó vacío y en el
instante apropiado para imponerse de cabeza, a partir de entonces, hubo
diez minutos de nuevo sufrimiento para Independiente, por los dos puntos
vitales que se le escapaban como si tuviera los bolsillos rotos, pero
el tanteador careció de remedio.
Todo terminó con un
reparto que no le sirvió a ninguno de los dos conjuntos, pero el dolor
de Independiente fue mayúsculo, los jugadores se fueron silbados y el
clima era de muchísima tensión.
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