PUMAS VUELVE A DECEPCIONAR

Pumas volvió a desaprovechar la oportunidad de congraciarse con su gente en el Olímpico Universitario, al empatar sin goles ante el Santos y fallar un penal casi al término de la primera parte.
Efraín el Chispa Velarde anunció hacia donde cobraría la pena máxima y el experimentado Oswaldo Sánchez se la detuvo.
Lo cierto es que Pumas sigue sin caminar en el Torneo Clausura 2013, y en cinco actuaciones apenas suma 5 puntos, los laguneros, por su parte, están mejor colocados en la tabla general y llegan a 8 unidades, producto de dos victorias y dos empates.
Pumas arrancó el juego del que se esperaba mucho y volvió a fallarle a su gente, por lo menos en la primera parte, salió a hacer el gasto, como es su costumbre, pero se topó con un contrincante que de colmilludo tiene mucho. 
Los laguneros apretaban bien la salida del anfitrión y contragolpeaban, aunque no con tanto fervor, pues lo más importante era contener el ímpetu universitario que apenas creó una jugada de peligro en los primeros minutos con un disparo pegado al palo de Chispa Velarde, el Santos hizo lo suyo con un remate de Darwin Quintero que busca el ángulo.
Para Oswaldo, lo poco que tenía en su área lo resolvía bien, como al 27' cuando en un centro de Javier Cortés, el defensa Darío Verón remató abajo y el guardameta alejó el peligro saliendo abajo.
Los laguneros tenían mayor determinación a la hora de atacar, el Picolín Palacios tuvo que salir con los puños a despejar un disparo, tras cobrarse un falta, luego se dió el poste de Hércules y en elcontrarremate Oribe Peralta hizo la jugada más difícil al intentar una chalaca en lugar de ser más práctico y rematar a portería abierta al 35'.
Y llegó la polémica: al 38', Rafael Figueroa le dio un leve jalón a Herrera en el área, jugada que el árbitro no consideró falta, el zaguero fue perdonado una vez, pero en la segunda infracción ya no, al 44', Pumas tuvo un penal a favor, cuyo disparo fue anunciado claramente por el "Chispa" Vellarde, Oswaldo supo desde el principio que era suyo el balón y evitó la que hubiera sido la primera anotación universitaria.
Y al final, Pumas no pudo evitar los abucheos de su afición.
La parte complementaria mejoró en intensidad por ambos bandos, y Pumas volvió a imprimirle a su futbol más dinámica y desde el primer minuto se dejó sentir teniendo el balón y pisando varias veces el área; sin embargo, jugaba con cierta precipitación, apurado por abrir el marcador, en cambio, el Santos en su primera llegada, ahora envió la pelota al travesaño, a disparo del propio Hércules.
El encuentro terminó de ida y vuelta, con acciones de riesgo en ambos lados, aunque precipitadas, más llevadas por el error del contrario.