El Chelsea se aseguró el primer puesto en su grupo de la Champions League al arrasar al Schalke, al que propinó una goleada
a domicilio (0-5), la superioridad del equipo de José Mourinho fue aplastante desde el comienzo del duelo.
El
Chelsea se puso por delante con un remate de cabeza de
John Terry (2') tras un saque de esquina lanzado desde la izquierda por Cesc
Fabregas.
Ya en la jugada que generó el saque de esquina, el equipo inglés
había estado cerca del gol cuando el meta Ralf Fährmann salvó con una
buena parada un remate de Diego Costa.
El gol tempranero
determinó el partido, el Chelsea pudo dedicarse a controlar el juego sin
precipitación, pese a lo cual llegó a combinar con excesiva libertad
cerca del área del Schalke.
El equipo alemán, por su parte,
no encontraba el rumbo, perdía balones con facilidad y sólo una vez
estuvo cerca, un poco por azar, de meterse otra vez en el partido
cuando, Eric-Maxim Choupo Moting firmó un disparo de
media distancia que pegó en Cahill para luego estrellarse en el
larguero.
Pese a esa ocasión, la tónica del partido no
apuntaba el empate del Schalke, sino al segundo gol del Chelsea que
llegó por medio del brasileño Wiliam (29'), que definió con un
remate al primer poste dentro del área tras una pared con el belga Edin
Hazard.
La situación ya era desesperada para el Schalke, pero se agravó aún
más cuando, Jan Kirchoff (43') marcó de cabeza en propia
puerta al tratar de rechazar un saque de esquina.
Con el
0-3, y con la superioridad que estaba mostrando el Chelsea en el terreno
de juego, los equipos se fueron al descanso con el partido ya
sentenciado.
El segundo tiempo sólo podía ser de trámite o
de fiesta para el Chelsea y al final fue lo segundo, en buena parte
debido a la entrada de Didier Drogba.
Cuando
llevaba diez minutos en el campo, el marfileño hizo el cuarto a puerta
vacía, a centro de William, y dos minutos después sirvió el
quinto, que marcó de cabeza Ramírez (78').
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