Bayern Munich está en octavos de final de la Champions League y, como el Barça,
también como primero de grupo tras golear a Olympiacos por un
rotundo 4-0. El empate valía a los dos equipos para asegurarse la
clasificación sin esperar a la última jornada, pero los bávaros no
especularon y, con tantos de Douglas Costa
(8'), Lewandowski (16') y Thomas Müller (20') sentenciaron el partido en apenas 20 minutos. En la segunda parte Coman (69') redondeó el póquer.
Guardiola dejó muy claras las intenciones con la alineación
ultraofensiva que puso en el Allianz-Arena. Cinco jugadores del
ataque -Robben, Müller, Coman, Douglas Costa y Lewandowski- integraron
un once titular inédito. Pep solo lo ha repetido una vez en sus 129 partidos al frente del Bayern y desde luego en éste no fue.
Douglas Costa abrió el marcador al aprovechar que
Roberto rechazó en corto un disparo desde fuera del área de Boateng y
alojar el balón en la red con un disparo cruzado pegado al poste.
Despues Robert Lewandowski marcó el segundo, tras encontrarse un balón al borde
del área, con un remate desde unos doce metros, y Thomas
Müller aumentó la cuenta al marcar a puerta vacía aprovechando un pase
de cabeza de Arjen Robben tras una jugada de conjunto iniciada por Philipp
Lahm en la banda derecha.
Luego el temporal amainó un poco, aunque
el Bayern siguió fabricando ocasiones pero, a menos que
ocurriese un
milagro que no se anunciaba por ninguna parte, el partido estaba
liquidado. Olimpiakos intentó reaccionar presionando la salida del
Bayern y hasta llegó a tener una ocasión en una falta lanzada por
Milovojevic hacia el final del primer tiempo.
El partido parecía
tranquilo para el Bayern y el único lunar era que Robben había tenido
que ser sustituido por problemas musculares, al parecer, según informó el Bayern en el intermedio, como una medida de
precaución.
Al comienzo del segundo tiempo, se dio una situación
que hubiese podido darle un giro al partido cuando el Bayern se quedó
con diez hombres por expulsión de Holger Badstuber por
falta contra Ideye cuando, como último defensa, intentaba cortar un
contragolpe. Sin embargo, Olimpiakos hizo poco con su superioridad
numérica y, aunque el Bayern se replegó un poco y empezó a jugar con
más prudencia y sin el dominio habitual en cuanto a posesión de pelota,
seguía siendo el equipo que mostraba más llegada. Asi, el
cuarto estuvo cerca cuando Costa se robó una pelota en el centro del
campo y dejó atrás a toda la defensa del Olimpiakos para encarar solo a
Roberto, que salvó la situación en el último instante. Finalmente Coman hizo el cuarto, de cabeza, a pase de Müller. Eso acabó
con cualquier pretensión de reacción del Olimpiakos y le dio al Bayern
absoluta tranquilidad. Ya en el descuento, el quinto estuvo cerca cuando Müller estrelló un balón contra el poste.
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