Holanda, aspirante eterna al título, se frotaba las manos con su rival, la débil Costa Rica, a la que presentó todos sus respetos en las declaraciones previas al partido. No iban a menospreciar a un equipo que había conseguido grandes resultados con tres campeones del mundo (Italia, Inglaterra y Uruguay) y uno de la Eurocopa (Grecia).
El equipo de Van Gaal tenía a mano pasar a su cuarta semifinal de la historia, era una oportunidad muy interesante, pero antes tenían que superar a un muro que parecía infranqueable. No era otro que el de Keylor Navas, el portero costarricense sólo había recibido dos goles a lo largo del torneo y se empeñó en evitar un tercero para desesperación de la "oranje", lo logró durante los 120 minutos para conducir a los dos equipos hacia la prórroga.
Al inicio del partido ninguno equipo tomaba el control
del partido en los primeros minutos de iniciado, tanto holandeses como
"ticos" buscaban llegar al arco enemigo y fue el cuadro europeo con su tridente ofensivo, Sneijder, Robben y Van Persie, con
este último con la opción más clara, pero cuyo disparo estrelló en la
humanidad de Keylor Navas.
Navas comenzaba a ser la figura de Costa Rica de nuevo,
Bryan Ruiz perdió el esférico, la oportunidad le quedó franca a
Memphis Depay, pero atrás se encontraba atento el arquero tico, que realizó una gran atajada a cobro de tiro libre de Sneijder.
En el complemento, Holanda empezó a ser más incisivo,
retenían la pelota, abrían la cancha y Costa Rica arribaba poco al área
enemiga, los minutos transcurrían, ningún equipo parecía querer ganar,
pero el cuadro holandés era el que más tiempo jugaba en territorio
enemigo.
Wesley Sneijder le ponía algo de emoción al partido tras estrellar el balón en el poste, ante el lamento de sus
seguidores, que ya alistaban la garganta para cantar el gol que nunca
llegó otra vez por culpa de Keylor Navas, que volvía a
aparecer cuando era requerido, ahora a través de Van Persie.
El mismo Van Persie tuvo la gloria en sus pies,
pero en una jugada increíble, el estelar atacante no pudo conectar la
pelota, ante la mirada incrédula de toda la banca holandesa encabezada
por Louis Van Gaal.
Las emociones seguían en la recta final, todas del lado
holandés; en la línea junto con la complicidad del poste, Costa Rica se
salvaba y tendrían que definir en tiempos extras.
Las emociones del juego ambos equipos las tenían
reservadas para el alargue, jugadas a los postes, intervenciones
destacadas de ambos arqueros, mantenían el cero y no quedaba más remedio
que tirar penales para definir al último semifinalista, que al final fue
Holanda, que se enfrentará a Argentina en Sao Paulo para definir a uno
de los finalistas del Mundial Brasil 2014.
Bryant Ruiz y Michael Umaña fueron las víctimas de Krul, mientras que
por la causa naranja, Robin van Persie, Arjen Robben, Wesley Snejider y
Dirk Kuyt, acertaron en sus cobros, al igual que Celso Borges, Giancarlo
González y Christian Bolaños para los costarricenses.
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