A pesar del 0-3 logrado en la ida, el entrenador del equipo valenciano Juan Antonio Pizzi apostó por un once de garantías liderado por Dani Parejo, Eduardo Vargas y Paco Alcácer, mientras que el técnico del conjunto búlgaro, Stoicho Stoev, formó con lo esperado y con el goleador Roman Bezjak en punta.

Sobrepasado el ecuador del primer tiempo, el choque se volvió aburrido aunque los españoles comenzaban a tomar las riendas del mismo y el Ludogorets apenas inquietaba a Diego Alves, de hecho, hubo que esperar hasta el 39', cuando Hristo Zlatinski probó al portero local con un disparo desde la frontal que atajó el propio Alves sin problemas.
Antes del descanso, Parejo, con un lanzamiento de falta que se estrelló en el larguero de Vladislav Stoyanov, pudo inaugurar el marcador.
A poco de iniciarse el segundo tiempo, Alcácer desde dentro del área perdonó con un tiro que se fue desviado, seguidamente respondió para el Ludogorets Svetoslav Dyakov, pero Alves envió su disparo a córner. La segunda parte comenzaba con buenas expectativas.
El partido se convirtió muy pronto en un encuentro de ida y vuelta en el que al Valencia poco a poco mejoró en intensidad, tensión y precisión y ante un rival que jugaba cada vez más abierto, abrió el marcador en un buen centro de Cartabia que cabeceó Paco Alcácer (59') tras un contragolpe.
Ahí quedó cerrado lo poco que restaba de eliminatoria, aunque en una aproximación de Bezjak, Diego Alves realizó una gran parada en la mejor opción del equipo búlgaro hasta ese momento.
El encuentro mantuvo hasta el final la misma tónica, aunque con la sensación de que el segundo tanto local estaba más cerca que el empate del equipo búlgaro, al menos hasta que en los últimos minutos el balón rondó más de lo esperado la meta de Alves. Sin embargo, no hubo más.
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