Este encuentro estuvo marcado por el debut internacional de Antoine Griezmann y Lucas Digne, mientras que Franck Ribéry regresó a los terrenos de juego tras un mes de ausencia por lesión.

Benzema abrió el marcador con un potente disparo y luego Matuidi puso el segundo y definitivo al borde del descanso.
En la segunda mitad el equipo de Didier Deschamps se centró en controlar la situación, sin asumir excesivos riesgos ante un adversario que no tuvo su mejor noche.
En el Mundial, Francia partirá como clara favorita del grupo E, donde también están Suiza, Ecuador y Honduras. Holanda, por contra, necesitará mejorar si no quiere tener problemas en la primera fase mundialista, donde quedó encuadrada en un grupo B exigente, con España (campeona del mundo), Chile y Australia.
Los neerlandeses no tuvieron excesivas ideas en ataque y sí muchos problemas defensivos, en ocasiones se mostraron agresivos, al límite de lo reglamentario, especialmente con un pie elevado de Quincy Promes a la altura de la cara de Patrice Evra o una entrada de Gregory Van der Wiel sobre Mathieu Valbuena.
Louis Van Gaal echó de menos especialmente a Arjen Robben, baja en esta ocasión. Robin Van Persie, que estaba en duda, pudo finalmente jugar, pero no tuvo puntería en el Stade de France.
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