PALMEIRAS LE SACA EMPATE AL TIJUANA

Xolos de Tijuana empató (0-0) con el Palmeiras en el partido de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores, el primer tiempo terminó con una clara oportunidad de gol para Riascos, pero el balón pasó rozando el travesaño y todo acabó en paridad en el Estadio Caliente.
Esta vez Xolos no pudo, careció de ideas, precisión y forma, el campeón mexicano no sacó ventaja y empató ante un Palmeiras opaco, que rescató la igualdad gracias a las atajadas de Bruno Cortez.
La ida de octavos de final de Copa Libertadores no fue como los "Perros" la planearon, la vuelta será el 14 de mayo con la única ventaja de no haber recibido gol como visitante.
La esperanza no se ha diluido, el primer tiempo inició con un cuadro fronterizo inconexo, impreciso, incluso hasta nervioso, Fidel Martínez y Duvier Riascos querían hacer la jugada grande sin asociarse ni voltear a ver a los compañeros, Javier Gandolfi se peleaba con todo mundo, mientras que Fernando Arce y Edgar Castillo fallaban pases irrisorios, de trámite.
En resumen, no era el Tijuana de otras tardes, así, sin mucho esforzarse, la línea defensiva comandada por Henrique Buss casi no tuvo problemas incluso los brasileños pudieron haber aprovechado los yerros defensivos mexicanos, pero les faltó fuerza, intensidad y precisión en los tiros de media distancia sobre el marco de Cirilo Saucedo.
Xolos se asentó de a poco, fue mejorando en la posesión y distribución, en la intensidad y la presión, en la forma y en el fondo, aunque en todo momento le faltó puntería luego de que Alfredo Moreno mandara un tiro a un lado, Pellerano probara de media distancia, Riascos cabeceara en dirección al travesaño, pero el "Chango" terminó por enmudecer al estadio Caliente cuando ingresó sin marca al área y ante el portero, falló de manera increíble.
El grito ahogado de gol comenzaría a extenderse en la parte complementaria, en gran medida sofocado por las grandes atajadas del portero verdiblanco, Bruno Cortez, quien con un par de manotazos providenciales a disparos de Richard Ruiz y Duvier Riascos, mantuvo su valla invulnerada.
Quedaba en claro que el marcador no se abriría y que habrá que esperar a un partido de vuelta mágico, prodigioso, de esos que tiene algunos meses que Xolos no ofrece.

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