El Girondins de Bordeaux ha firmado una excelente actuación defensiva
para deshacerse del Dynamo Kyiv y alcanzar los octavos de final
gracias a un tanto de Cheick Diabaté (41').
En mitad de una racha de nueve
victorias europeas en el Stade Chaban-Delmas, los locales llegaban al
choque de vuelta con un gol a domicilio en su haber, y para no arriesgar
se llevaron también el segundo partido con un tanto de Diabaté, los
hombres de Francis Gillot aguantaron bien la presión del Dynamo tras el
descanso y ahora se medirán al Benfica.
Tras el empate a uno en
Ucrania de la semana pasada, el equipo visitante sabía que tenía que
marcar sí o sí para tener opciones de pasar a octavos, Niko Kranjcar fue
el primero en probar a Cédric Carrasso, y luego Andriy Yarmolenko probó
suerte tras un córner, todo el peso del partido lo llevaban los
ucranianos, pero Admir Mehmedi fue incapaz de llegar a un centro de
Lukman Haruna y Carrasso una vez más tuvo que intervenir tras una falta
de Miguel Veloso.
El Burdeos estuvo muy metido atrás toda la
primera mitad, pero justo al final de ésta logró el gol, un saque de esquina de
Benoit Trémoulinas fue tocado por Grégory Sertic permitiendo a Diabaté
rematar a gol en el minuto 41.
Yarmolenko mandó un balón fuera
justo tras el descanso para el Dínamo, y Haruna falló un cabezazo franco
solo ante la portería, el equipo de Oleh Blokhin se fue desesperando
más y más según se acercaba el final, pero André Poko, Florian Marange y
Marc Planus estuvieron perfectos atrás y pusieron al Burdeos en los
octavos de final de la UEFA Europa League por primera
vez desde 2004.
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