Xolos
aprovechó su localía para tomar ventaja en la serie ante el Toluca (2-1), acompañados de su
entusiasta afición, que hoy llenó el campo sintético del Caliente (22,333), pero considerar
que este título está definido, es muy complicado.
Un Tijuana empeñado en creer que las historias se pueden
torcer fácilmente con entusiasmo, actitud y ataque y unos Diablos que se
adueñaron del partido (sobretodo en el segundo tiempo) y en cualquier
momento establecen que la experiencia de sus jugadores y de la zona
técnica infiere en la cancha.
Este primer ensayo favorece a Tijuana, más allá de una falla arbitral,
porque dentro del campo de juego fue quien buscó ofender a su
adversario, sabedor que en el Nemesio Diez las circunstancias van a ser
diferentes.
Sin embargo, al
final, un gol de diferencia, bajo las circunstancias que se jugarán en
Toluca puede ser mucho o nada,, dependerá si Sinha se conecta en el
mediocampo y si Duvier Riascos y Fidel Martínez son
puntuales a la hora de que Xolos exija que alguien se eche el equipo al
hombro y colabore en lo que sería una hazaña como visitantes la de
alcanzar el título.
Tijuana mostró que
puede, que la historia es sólo eso y que en el campo son 11 vs. 11 y lo
que de ahí derive serán lo que suceda única y exclusivamente dentro del
campo de juego en el choque de Vuelta.
Lo que
hizo Fidel Martínez, con su gol (24'), fue ilusionar a los miles de
aficionados en Tijuana, pero el emparejamiento que dio el "Pájaro"
Benítez (26') fue también para dar un golpe de autoridad y establecer que
Toluca no perdona y que mientras los tijuanenses no concretaron las
múltiples llegadas que generaron, ellos tienen la onza en los botínes
para apaciguar el ánimo rojinegro.
La polémica ya
alzó la mano y pidió también el protagonismo en la decisión arbitral
del segundo gol, la anotación de Pablo Aguilar (40') sería un
posicionamiento en fuera de juego, pero al final del día contó y habrá
que ver cómo lo resuelven los Diablos anímicamente.
Ni
Xolos ni tampoco Diablos renunciaron a sus estilos, salió
mejor librada el de Antonio Mohamed, pero la realidad es que el domingo
será muy diferente, porque los Diablos en casa son casi imbatibles y
sólo un auténtico equipo con raza de Campeón podrá doblegarlos, al menos
Xolos lo pudo hacer en casa, faltan otros 90 minutos y todo
puede pasar.
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