Marcelo Bielsa dispuso un once con pocas novedades sobre el césped del Stadion Letná. Una vez más, Fernando Llorente comenzaba el partido desde el banquillo. En el conjunto checo, destacar la presencia en defensa de Jiří Jarošík, ex del Real Zaragoza, y el peligroso delantero Václav Kadlec.

El Athletic pedía el descanso, pero recibió otro mazazo antes de marcharse a los vestuarios. Bekim Balaj remató de cabeza solo dentro del área un centro de Josef Hušbauer, y la mala suerte quiso que Aduriz se introdujera la pelota en propia puerta (41'). Con el 2-0 se llegó al descanso en la capital checa.
El Athletic dió la impresión de salir más centrado en la segunda parte, en el 56’ el Sparta hizo el tercero al transformar Hušbauer un penal cometido por Castillo sobre Kadlec. Ya con el partido muy cuesta arriba llegó, por fin, una buena noticia para el Athletic. Y es que Ander Herrera volvió a los terrenos de juego 25 días después de pasar por quirófano por una lesión en el pubis.
También ingresó en el terreno de juego Llorente, y los cambios le dieron otro aire al Athletic. Así pues, De Marcos recortó distancias en el 73’ tras una buena jugada individual de Iker Muniain. A pesar de que el conjunto vizcaíno lo intentó de ahí al final del partido, se mostró estéril en ataque y con el 3-1 se llegó al final del partido. Este resultado deja a los de Bielsa coleros en su grupo con un solo punto, a cinco del Olympique Lyonnais, próximo rival al que visita el Athletic.
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