EL BALÓN PARADO CONDENA AL ESPANYOL

El Málaga salvó un empate con dos goles a balón parado, después de que el Espanyol se adelantara en dos ocasiones con tantos del ecuatoriano Felipe Caicedo (17'), y del uruguayo Christian Stuani (88'), una acción que Duda (91') dejó en nada con una falta directa en el descuento.
Los catalanes presentaron una propuesta más ofensiva que el contrario, que se limitó a esperar y no mostró su mejor versión. Incluso en la segunda mitad se aferró a Kameni para frenar al rival.
El hambre del Espanyol, empezó el partido con un punto de nueve posibles, se hizo evidente desde el
principio, se adueñó de su juego. La presión en todas las líneas era máxima y su fútbol, muy vertical, con alguna ocasión clara como una jugada individual de Víctor Sánchez que frustró Kameni.
El Málaga aguantaba y esperaba, cuando el ímpetu inicial del contrario menguó, aparecieron los primeros avisos: tiros lejanos y centros sin puntería, aunque los andaluces ya pisaban el área de Casilla.
Lo intentó Lucas Vázquez con Montañés, pero la asociación que dio resultado fue la de Sergio García con Caicedo, el ecuatoriano se estrenó ante su afición recortando ante el portero y empujando el balón. Aprovechó al máximo la asistencia de su capitán, que firmó una excelente incursión en la defensa de Javi Gracia.
Cuando mejor estaba el conjunto visitante llegó el mazazo, el Málaga tardó unos minutos en recuperarse hasta que volvió al partido. De todos modos, al margen de un peligroso centro de Rosales desde la derecha, que desvió Casilla, la mayoría de sus llegadas eran inocuas.
El Espanyol fue el claro vencedor de esta primera mitad, el visitante estaba obligado a mover sus fichas tras el descanso.
En la reanudación se vio a un Málaga más consistente y ordenado, su planteamiento dio resultados rápido: forzó dos saques de esquina y el segundo fue dentro. Camacho (53'), sin demasiada oposición en el marcaje, remató el córner, Casilla se estiró, pero no pudo detener el empate que se coló en el marcador.
Los de Javi Gracia no avanzaban las líneas pese a la diana y tras unos minutos desorientados por el tanto, los blanquiazules volvieron a presionar arriba. Querían el segundo y estuvieron muy cerca cuando Stuani mandó un balón al larguero, el Espanyol reclamó penal por mano de Rosales.
El cuadro local tenía ahora mucha más presencia en el área rival que el Málaga, de todos modos, era el día de Kameni, el portero camerunés fue providencial apagando las claras ocasiones de Stuani, Salva Sevilla y Sergio García. Lo que no pudo parar fue el remate de cabeza de, otra vez, Stuani, tras una falta cerca del áre, el uruguayo picó el balón y lo convirtió en el 2-1, parecía el final. Incluso Sergio González agotó sus cambios dando entrada a Raúl Rodríguez por Sergio García.
Pero el cierre lo pondría el Málaga, concretamente, Duda y de falta directa desde la frontal, el portugués colocó el balón en la escuadra y cortó la euforia que se había instalado dos minutos antes.

No hay comentarios.: