Un triplete de Gareth Bale (22', 49' y 63') y un doblete de Benzema (15' y 91') dieron
la victoria al Real Madrid sobre el Deportivo la Coruña (5-0) en el
estreno de Zinedine Zidane en el banquillo merengue.
Lo
recibieron como héroe, la multitud en la grada aplaudia mientras que en las pantallas del
estadio aparecía
una antología de su paso por el Real Madrid, desde la
cancha, vestido de corto, hasta el túnel de vestidores en calidad de
jefe.
El Madrid
lucha por mantener la presión en la tabla sobre los dos punteros, el Barça goleó y aunque el Atlético podría no jugar debido a la situación climática, su partido ante el Celta, viene en gran nivel.
El cambio de mando,
que lavó la cara al Real Madrid y trajo de vuelta la alegría al
vestidor, es demasiado reciente como para que de buenas a primeras queden
resueltos todos sus problemas; aunque por algo se empieza y el Madrid de
Zidane, al menos, ha recuperado el sentido común.
En el primero, Benzema, con un taconazo exquisito, abrió el
marcador en una jugada controversial producto de un tiro de esquina. La
defensa despejó, pero el balón le cayó a Ramos, que intentó la volea
pero le salió el pase para el francés que anotó, ojo,
Bale estaba en posición adelantada frente al portero y aunque no intervino podría haberse anulado el gol, cuestión de criterios.
En el segundo gol, Carvajal emprendió la carrera
por la banda para ponerle un tremendo pase a Gareth Bale, que en el
centro del área y entre dos defensas, marcó el 2-0 de cabeza.
Apenas iniciada la segunda mitad, el galés marcó el 3-0 con un potente
disparo a pase de Cristiano Ronaldo
desde la derecha después de que Luka
Modric, en los controles, viera abierto al portugués y le adelantara el
balón.
Diez minutos después, cayó el tercero en su cuenta
personal, le gana en el salto a la defensa entera y
con un certero cabezazo puso el 4-0.
Para entonces la grada
derrochaba felicidad pese a la copiosa lluvia. En el
campo, Isco dejaba su lugar a James tras volver a jugar después de tres
encuentros.Luego
Jesé, que no aparecía desde hacía un mes y quien tuvo al menos media
hora de juego, y Raphael Varane, que jugó toda la segunda parte en lugar
de Sergio Ramos.
El del cierre lo puso Karim Benzema con un golazo, un balón suelto que le quedó muy atras a Cristiano, fue aprovechado por el francés para mandar un misil que pegó
en el travesaño antes de ingresar al arco de Lux. Goleada y buenos aires en tienda merengue ahora resta saber si durará.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario