AL "SON" DEL COREANO, LEVERKUSEN GOLEA AL BENFICA

Bayer Leverkusen consiguió un triunfo con autoridad en casa frente al Benfica de Portugal a quien venció 3-1 y de paso consiguió sus primeros tres puntos en la Champions League para recuperar terreno dentro del Grupo C al quedar por detrás de Zenit y Mónaco por tan solo un punto.

El coreano Son Heung-Min fue el mejor hombre del equipo alemán al participar en las primeras dos anotaciones de su equipo, primero, un potente disparo de él fue mal rechazado por el arquero Julio César quien la dejó a merced de Stefan Kiessling (25') para abrir el marcador.

Ocho minutos después, el Leverkusen tejió una gran jugada por banda derecha por conducto de Karim Bellarabi quien centró raso para la llegada del coreano Son (34') quien de primera intención conectó el balón para conseguir un verdadero golazo y el 2-0.

En el segundo tiempo vino la reacción del Benfica por conducto de Eduardo Salvio (62') quien realizó una estupenda jugada individual en el área del Bayer para el 2-1.

Pero dos minutos después, el árbitro marcó un penal a favor del equipo local que fue bien cobrado por Hakan Calhanoglu (64') para el 3-1 definitivo.

Si el Leverkusen había bajado un poco su nivel en las últimas semanas, los alemanes realmente volvieron a su mejor forma forzando al Benfica a realizar muchos errores con una intensa presión. Inevitablemente las ocasiones fueron materializadas, con Son Heung-Min forzando en dos ocasiones las paradas de Júlio César y Lars Bender viendo como su intento se iba al poste.
Júlio César, en portería por la sanción de Artur, evitó ocasiones de Karim Bellarabi y Son, y se impuso al surcoreano Son, pero nada pudo hacer ante el rebote de Stefan Kiessling, que puso el 1-0.
Lejos de contentarse con el gol inicial, el Leverkusen siguió a la carga y después de otro examen de Bellarabi ante Júlio César llegó el segundo. Son fue el finalizador esta vez, mandando a la escuadra el centro de Bellarabi.
Fue enormemente prometedor el comienzo para el Leverkusen, con un Benfica que apenas pudo salir de su campo, y que mucho menos forzó a Bernd Leno. De hecho, fue el Leverkusen el que parecía que tenía más
probabilidades de convertir el tercero. Hakan Calhanoglu quizás debió hacerlo cuando se presentó con claridad tras el centro de Roberto Hilbert, pero el esférico se movió delante del internacional turco y no pudo ser conectado con acierto.
Ese error fue condenado por el Benfica, con Eduardo Salvio reduciendo distancias en un remate cerca del poste, pero el Leverkusen rápidamente volvió a poner la diferencia de dos goles en el marcador, con Kiessling cayendo en el área con Jardel. Calhanoglu se redimió al marcar el penal de forma ajustada.
Calhanoglu pudo doblar su cuenta particular, pero Júlio César volvió a aparecer para frenar a un Leverkusen que siguió apretando. El cuarto gol no llegó, pero los de Schmidt ya piensan en el doble enfrentamiento contra el Zenit, los días 22 de octubre y 4 de noviembre con muchas razones para mostrarse confiados.