Los navarros han encajado su séptima derrota liguera en su estadio e igualan su peor racha de la temporada. Por su parte, el Sevilla ofreció una imagen muy seria en defensa, no notó el desgaste europeo y mantiene una racha de seis encuentros consecutivos sin perder en la liga, desde el 9 de febrero.
La primera ocasión clara la tuvo Oriol Riera, que remató de cabeza alto un balón centrado por Marc Bertrán desde la banda derecha del ataque navarro. Una jugada ensayada de falta casi termina dentro del marco de Beto con Oriol Riera creando peligro, ante un Sevilla que esperaba su oportunidad.
Una arrancada sevillista terminó en los pies de Jairo que regateó a Loties y lanzó un disparo raso con su pierna izquierda, que se coló junto al poste de la portería de Andrés Fernández. Tras el gol, llegaron los nervios al equipo de Javi Gracia. Fazio tuvo el segundo gol con un remate de cabeza que salio fuera a puerta vacía, tras una salida de puños de Andrés que no llegó a despejar.
La última opción de ataque local antes del descanso fue un remate de Damiá en el segundo palo que no encontró portería. A continuación, un contrataque sevillista lo envió Jairo al larguero, a puerta vacía, y el rechazo lo desvió Damiá con la mano, el penal lo transformó Bacca engañando al portero osasunista.
En la reanudación, Osasuna salió con ganas de marcar un gol que le metiera en el partido Dominó territorialmente y mantuvo un ritmo alto de juego. Javi Gracia arriesgó con el paso de los minutos. Quitó al defensa Damiá y metió en el campo a Lobato.
Pese a ello, un error de Arribas en la marca a Jairo, creó una clara oportunidad que Bacca envió fuera de portería. Seguido, un error de Damiá dejó el balón a los pies de Bacca que envió el esférico al poste.
El Sevilla, que perdonó el 0-3 en varios contragolpes, se mantuvo muy firme en defensa y apenas dio opción a Osasuna, que no encontró premio a su esfuerzo físico pese al gol de Acuña (92').
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