
Y es que Seedorf, que llegó al club en enero, salió al campo con la presión de la directiva del conjunto, propiedad del ex primer ministro Silvio Berlusconi, y en el que, de no sumar resultados, tendría las horas contadas.
Finalmente, el equipo lombardo dominó el encuentro ante el Fiorentina al que marcó dos tantos, procedentes de las botas del defensa galo Mexes (23') y de Mario Balotelli (64'), con otro tanto en la mitad del segundo tiempo.
Con este resultado, el técnico relajará a la directiva del Milan y a los propios "tifosi", que se han venido manifestando en las últimas semanas a las puertas del San Siro o de los estadios en los que jugaba su equipo para reivindicar una mejora de la situación del club.
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