ESPANYOL EVITA EL "ALCORCONAZO"

El Espanyol clasificó cuartos de final de la Copa del Rey, donde se medirá a Osasuna o Real Madrid, tras derrotar al Alcorcón en una batalla de infarto (4-2). El equipo de Segunda División aguantó con entereza y estuvo clasificado durante la mayor parte del choque, pero el arreón final blanquiazul impidió una nueva noche heroica de los alfareros.

Hubiese sido de las más grandes, porque Miguel Álvarez perdió a dos futbolistas por lesión y apenas tuvo margen de maniobra desde el banquillo. El fracaso barcelonés, de haberse consumado, dolería a Jhon Córdoba más que a nadie. El ariete colombiano falló un sinfín de ocasiones que podían haber ahorrado muchos sudores a sus compañeros y su afición.
El delantero Óscar Plano (4') adelantó por sorpresa al modesto conjunto madrileño después de una buena combinación entre Rubén Sanz y Prendes, elevando a tres la cifra de goles que los "pericos" necesitaban para superar la eliminatoria.
En semejantes circunstancias, conservar la ventaja hasta el intermedio habría supuesto un paso de gigante para el Alcorcón, pero el Espanyol se levantó enseguida, con involuntaria colaboración de Iribas, que no despejó bien ante Córdoba y consintió que Simão (10') marcase el 1-1, el mismo Iribas derribó al veterano portugués dentro del área escasos minutos más tarde; y Sergio García (23') elevó el 2-1 desde los once metros con más de una hora de juego por delante. Antes del descanso se anuló el tercero de los blanquiazules por fuera de juego de Stuani.
Aguirre puso ataque total, juntó a Córdoba, Sergio García y Stuani, pero el tiempo pasaba y alguna vez el arquero Dani Giménez y alguna otra el poste retrasaron lo que parecía inevitable, hasta que, a diez para la conclusión, el partido enloqueció de nuevo.
Fue Javito (80') el encargado de resucitar contra pronóstico el espíritu del "Alcorconazo", con un 2-2 que parecía ya imposible de levantar. Pero los "pericos", incapaces de meter uno en todo el segundo periodo, sacaron el orgullo y el acierto y encontraron los dos que precisaban en poco más de cinco minutos. El zurdo Víctor Álvarez (84') anotó al recoger un pase a la espalda de la defensa visitante; y el olvidado Pizzi (87') se reivindicó con el golazo que hizo realidad el milagro, el Espanyol avanza a cuartos; con honor y amargura, el Alcorcón se queda a las puertas de su enésima gesta.