Godoy Cruz derrotó por 2-0 a Tigre en un encuentro que
se desarrolló en el Estadio Malvinas Argentinas, en Mendoza, pero aún
así el equipo que dirige Martín Palermo permanece en zona de descenso.
José
Luis Fernández, a los 25 minutos de la primera etapa, con un estupendo
tiro libre, y Jonathan Ramis, a los 93', anotaron los
goles que le dieron la victoria a Godoy Cruz.
Tigre
finalizó el encuentro con dos hombres menos por las expulsiones de
Matías Pérez García, por doble amarilla, y Marcos Gelabert, roja
directa, a los 21 y 25 minutos del segundo tiempo, respectivamente.
Godoy
Cruz aún permanece en zona de descenso (1,178 de promedio) pero podría
alcanzar a Argentinos Juniors si el conjunto de La Paternal (1,192) es
derrotado por Boca Juniors el próximo domingo.
La victoria
de Godoy Cruz fue justa, pero exagerada, ya que Tigre, con dos hombres
menos y sin tener la pelota en su poder tanto tiempo, provocó las
suficientes ocasiones de gol que pudieron haber modificado el curso del cotejo
cuando estaba 1-0 abajo en el marcador.
Godoy Cruz golpeó
en el momento justo, cuando convirtió su primer gol estaba jugando mejor
que Tigre, y después trató de manejar el ritmo del partido en base al
control del balón.
Tigre, a lo largo de casi todo el
encuentro, jugó un poco desordenado, pero aun así llegó sobre la valla
defendida por Jorge Carranza y le creó tres situaciones claras de gol.
Dos
de esas situaciones ocurrieron en la primera parte, a los 30 minutos,
un remate de Emiliano Ellecópulos pegó en la base del palo derecho y, a
los 33', otro disparo del joven mediocampista fue desviado a un metro de
la línea por el uruguayo Jorge Curbelo.
La tercera y última
escena propicia para el Matador se observó en el segundo episodio,
cuando Ramiro Leone, solo frente al arco, tras una gran jugada de Pérez
García, tiró la pelota por sobre el travesaño.
En el tercer
minuto de tiempo adicionado llegó el segundo y decisivo tanto de los
anfitriones, Mauro Obolo habilitó con un pase profundo a Jonathan Ramis,
quien definió con un toque suave por encima del cuerpo de Javier
García.
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