ZARAGOZA TOMA MORAL Y CLASIFICA

El Real Zaragoza resolvió sin excesivos apuros su acceso a los cuartos de final de la Copa del Rey al superar al Levante, por 2-1, en un partido más práctico que brillante y que, además, aprovechó para fortalecer su debilitada moral como local esta temporada en la competición liguera.
A los locales les costaba sacar rendimiento a la mayor posesión del balón y apenas eran capaces de llegar con peligro a la portería de Navas, que en los primeros veinte minutos apenas tuvo trabajo y solo destacó un remate de Víctor Rodríguez.

Los azulgranas tuvieron la oportunidad de mostrar en varias ocasiones sus rápidas contras, pero no estuvieron finos en el control del balón para culminarlas.
En el primer gol, una volea de Aranda desde fuera del área no acertó a retenerla Navas y el balón suelto primero lo cabeceó Víctor Rodríguez camino del fondo de las mallas y Zuculini (23') le dió el empujón definitivo, aunque su posición la protestaron los visitantes.
A la media hora un balón cruzado en el centro del área local lo desvió Paredes, aunque le faltó muy poco para convertirse en el gol de la igualdad granota.
Los levantinos seguían necesitando marcar dos goles para poner a su favor la eliminatoria, pero apenas variaron su disposición y sus intenciones sobre el terreno de juego.
Tras el descanso, los visitantes salieron algo más incisivos y se acercaron con algo más de peligro, una duda de Leo Franco en una salida les espoleó todavía más y a los diez minutos Juanlu empalmó un buen remate cruzado que se fue fuera por poco.
La jugada que puso casi definitivamente imposible la eliminatoria a los hombres de Juan Ignacio Martínez fue una dura entrada de Rodas a Víctor Rodríguez que le costó la expulsión, en el cobro de la falta el balón le llegó a Montañés (60'), completamente solo, que dispuso del tiempo suficiente para pensar dónde quería enviar su remate para marcar el segundo gol de su equipo.
A falta de un cuarto de hora, Víctor Rodríguez pudo cerrar definitivamente el choque tras un brillante pase de la muerte de Montañés que se le fue alto.
Con la eliminatoria vista para sentencia, al encuentro le sobraron los últimos minutos con dos equipos deseando que el reloj fuese un poco más deprisa.