Inter y Torino igualaron
en el estadio San Siro de Milán por 2 a 2: primero anotó Cristian
Chivu ((5'), luego un doblete de Riccardo Meggiorini (23' y 52') dió vuelta el marcador y
al final Esteban Cambiasso (66') firmó el empate.
Un resultado que lo deja al nerazzurro cuarto, ahora con 40 puntos,
mientras que le costó una posición a Torino que fue rebasado por Chievo y
ahora se ubica decimosegundo con 27 unidades (que serían 28 sin el punto
de penalización con el que comenzó el torneo).
Sin dudas la igualdad fue justa y refleja cuanto visto sobre el
césped, es decir mucho equilibrio entre dos equipos que alternaron
buenos y malos momentos, fue seguramente una chance desperdiciada por parte de los milaneses,
que en cinco minutos ya ganaban por 1 a 0 gracias a un tiro libre
magistral de Chivu, el partido parecía ponérsele en bajada al
anfitrión que, en cambio, tuvieron el demérito de jugar muy lento,
queriendo administrar el resultado en lugar de presionar y poner en
dificultad al Toro.
De esa manera, la visita pudo salir a jugársela, sin arriesgar más
nada y atacando con alguna llamarada, asi al minuto 23, Guarin se fue a buscar el balón sobre
la media luna, con su equipo totalmente mal parado considerando que él
jugaba por derecha, que los dos centrales estaban demasiado abiertos y
que ambos marcadores de punta estaba más cerca a la mitad de la cancha
que al área, quiso gambetear y perdió el balón contra
Barreto: el brasilero se la tocó a Meggiorini y el italiano sacudió un
zurdazo inatajable.
En el complemento, se invirtieron las situaciones, porque
al séptimo minuto Cerci se escapó muy bien por derecha, madrugándolo a
Pereira (quien tomó el puesto del lesionado Chivu al minuto 28) y puso
un centro bajo que Meggiorini, totalmente solo, conectó al límite del
área chica, a la altura del primer palo, y empujó adentro sin problemas.
Inter reaccionó con orgullo pero sin muchas ideas, mejorando gracias a
los cambios de Stramaccioni, quien lo puso a Cambiasso por Mudingayi sin embargo fué Javier Zanetti, quien se puso el equipo al hombro, jugó por dos y
protagonizó la jugada del empate, llegando muy bien hasta el fondo por
derecha y poniendo un gran centro bajo hacia el segundo palo, en donde
Cambiasso tuvo sólo que pegarle y salir a gritar el gol.
El partido se puso emocionante con el empate y enseguida los dos
equipos tuvieron algunas ocasiones de gol, pero al final solo fué empate.
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