Los azulgrana, en cambio, se quedan con 11 unidades y por ahora mantienen la séptima plaza, si bien cuando termine la novena jornada podrían verse superados por unos cuantos cuadros.
El triunfo no fue merecido, tanto que el equipo bianconero salió de la cancha silbado por toda la hinchada local, que le gritó por lo menos por cinco minutos "ladrones, ladrones", son escenas muy feas, que se refieren lamentablemente con razón a los episodios que decidieron el desafío en favor de la Vieja Señora.
Catania empezó a acostumbrarse al esquema, se acomodó sobre el campo y empezó a mostrarse con peligro, equilibrando el trámite y hasta adueñarse, en parte, del partido, fué en ese periodo que Marchese rindió peligroso con una serie de centros desde la izquierda.
En uno de esas jugadas, al minuto 25, Spolli desvió de
cabeza, Lodi rozó y el balón se estampó en el palo, antes de que
Bergessio recogiera el rebote y anotara con el arco libre, el delantero
festejó, toda la hinchada lo gritó y los referís indicaron el centro de
la cancha. Era gol.Pero no fue gol, porque las protestas de Juventus fueron escuchadas por el juez de línea, que lo llamó al referí, se consultó con él y, 44 segundos después del gol, con todo Catania en su propia mitad de la cancha, el referí anuló el 1 a 0, como dijo el mismo Pulvirenti, Presidente del club siciliano, fue el banco juventino y no los referís los responsables de la anulación, puesto que fueron sus protestas a cambiar la decisión del juez de línea.
Decisión que por encima había sido acertada, porque no había fuera de juego, hay que preguntarse sobre cual base el juez de línea haya regresado sobre sus pasos y porque los jugadores del banco visitante no fueron amonestados, considerando que las protestas están (o deberían estar) prohibidas, según el reglamento.
En el complemento Catania se veía aún bastante nervioso, pero menos respecto a la primera etapa, también considerando el hecho que al final de los primeros 45 minutos ya contaba con 5 amonestados (todas amarillas discutibles si no equivocadas), por lo que no podía permitirse perder la cabeza.
El desafío seguía equilibrado y los dos cuadros parecía poder crear una ocasión de un momento para el otro, Juventus estuvo algo mejor y lo aprovechó para ponerse en ventaja: Bendtner, en posición adelantada, recibió cerca del punto del penal y falló el mano a mano, pero el inevitable rebote concedido por Andujar se transformó en una asistencia perfecta para Vidal, quien empujó con facilidad firmando el 1 a 0.
El local perdió un poco la cabeza y Marchese se hizo echar por una estúpida falta de mano en el medio, el partido parecía terminarse ahí, pero en realidad, gracias especialmente al gran aporte de la figura de la cancha, Mariano Izco, los azulgrana quedaron atrapados al encuentro.
La Vieja Señora lucía cansada y si bien creó unas cuantas ocasiones para liquidar la cuestión, el cuadro se partió en dos y los volantes raramente subían, emblemático fue un córner en el que habían apenas dos bianconeri en el área adversaria.
De todas maneras, con hombre más y la ventaja para defender, Juventus no concedió prácticamente nada y si bien sufrió un poco, pudo administrar el resultado y aguantar el 1 a 0 hasta el final.
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