El CSKA Moscú y el Manchester United empataron 1-1 en un
partido en el que los ingleses desplegaron su mejor juego sólo en la
segunda parte, cuando destacó la visión del español Ander Herrera.
Los
rusos se adelantaron y pudieron marcar un segundo gol en el primer
tiempo, pero se vinieron abajo tras la reanudación, mientras los
ingleses merecieron el empate, aunque al final pecaron de falta de
ambición.
El holandés Louis Van Gaal optó por dejar en el
banquillo al español Mata y apostó por Herrera y Lingard en las bandas y
Martial y Rooney en la delantera, mientras, el CSKA puso
un equipo muy ofensivo con sólo un jugador de brega en el centro, el
sueco Wernbloom, y con el nigeriano Musa con falso interior. Los rusos se dejaron dominar en los primeros minutos e intentaron sorprender al equipo inglés con rápidas transiciones.Así,
tras varios amagos, una gran internada del lateral brasileño Mario
Fernandes fue frenada incomprensiblemente con la mano por el francés
Martial, penal que no dudó en señalar el árbitro. De Gea, un experto en parar penales, detuvo el disparo
pero el balón tras golpear el poste fue a parar a los pies del marfileño
Doumbia (15') que marcó ante la desesperación del guardameta español. El Manchester siguió dominando el partido, pero su
posesión era infructuosa, mientras los rusos seguían aproximándose de
vez en cuando con peligro al área visitante. Herrera y Valencia,
reconvertido ahora en lateral, intentaba en vano encontrar huecos en la
defensa rusa, mientras Martial y Lingard hacían la guerra por su cuenta
en algunas acciones individuales y Rooney estaba desaparecido.
De hecho, De Gea volvió a salvar a su equipo a la media
hora, cuando Musa robó un balón en el centro del campo y el disparo del
delantero local desde unos 35 metros le cogió adelantado, pero reaccionó
a tiempo y despejó a córner en una gran estirada.
En la segunda
parte Van Gaal no esperó a una posible mejoría en los primeros minutos y
en el descanso cambió al alemán Schweinsteiger por el belga Fellaini en
busca de mayor remate. Los problemas para los visitantes podían
haber sido aún mayores si el árbitro hubiera señalado un involuntario,
pero claro penal del
argentino Rojo en un fallido intento de despeje. Con Herrera como faro de todas las jugadas de ataque, el
Manchester comenzó a encerrar a los rusos en su área y Rooney tuvo una
buena ocasión tras un centro del futbolista vasco, pero su remate de
cabeza fue muy centrado. El empate llegó en otra jugada iniciada
por el exjugador del Athletic de Bilbao, que dio un pase medido a
Valencia que venía en velocidad y cuyo centro fue rematado
impecablemente de cabeza por Martial (65'). Ambos equipos
parecieron conformarse con el empate, aunque el frío pudo ser la
excusa, ya que en la capital rusa el termómetro marcaba cero grados. Al
Manchester United le faltó sangre para ir a por
la victoria en los últimos 20 minutos, justo cuando los rusos parecían
faltos de ideas y, lo que es peor, de energía hasta para contraatacar. De
esta forma, ambos equipos suman cuatro puntos y se enfrentarán dentro
de dos semanas en Manchester en un partido que pondrá a cada uno en su
sitio.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario