El
uruguayo Rodrigo Mora (43' y pen. 53') y el colombiano Teófilo
Gutiérrez (55') marcaron los goles para River, que en la jornada de
definición obtuvo su primer triunfo en la Copa en esta temporada, y
accedió como escolta merced a la victoria que Tigres logró en
Chiclayo sobre el peruano Juan Aurich por 4-5.
Así,
tras la última fecha, Tigres concluyó al tope del Grupo 6 con 14
puntos, seguido por River con 7, con lo cual ambos siguen en carrera,
mientras que Juan Aurich (6) y San José (4) quedaron al margen del torneo.
Con
el triunfo como única alternativa, River presentó una formación muy
ofensiva, con solamente tres defensores -el uruguayo Sánchez bajó a
colaborar en las pocas incursiones del equipo visitante-, y una
propuesta vertical, decidido a llevarse por delante a San José.
De
su lado, el equipo boliviano desembarcó en el Monumental con un
dispositivo netamente defensivo, con Mauro Bustamante como único hombre
de punta, y la misión de tratar de explotar algún contraataque a través
de los espacios que dejaba el local.
Apenas
tres minutos tardó River en llegar con mucho riesgo, cuando Mora entró
por el centro para conectar un centro desde la izquierda, pero su remate
dio en el travesaño cuando el arquero ya no tenía nada por hacer, y
poco después la oportunidad estuvo en un cabezazo de Sánchez que
encontró bien ubicado a Lampe.
Sin embargo,
con el transcurso de los minutos, el local perdió un poco de
concentración, con unos y otros pendientes de lo que pasaba en Chiclayo
entre Juan Aurich y Tigres.
Si bien el
local era el dueño por completo del desarrollo, también se mostraba
impreciso cuando se acercaba a la zona de definición, con decisiones
erróneas cada vez que se aproximaba al área boliviana, y con una
tendencia a centralizar el juego cuando lo indicado para tratar de
encontrar espacios era abrir por los costados, con Martínez por la
izquierda y Sánchez en la derecha.
En una
de esas desconcentraciones, Obando avanzó por la izquierda y envió el
pase atrás para Loayza, que tuvo la gran oportunidad para San José, pero Barovero salvó a River con una notable atajada.
Antes del final del primer tiempo, River por fin encontró el
gol, en un tiro de esquina en el que la defensa visitante perdió las
marcas, y Martínez asistió al uruguayo Mora, que tuvo tiempo para
acomodarse y sacar un derechazo combado que entró en el rincón izquierdo
de Lampe.
El primer gol alivió a River, que
ante la necesidad de sumar más goles para no tener problemas con la
diferencia de gol sumó a Driussi en el ataque, y en menos de diez
minutos terminó de liquidar el encuentro.
Sin la concentración mostrada en la primera mitad, San José
terminó de sellar su adiós con el segundo gol, convertido por Mora de
penal tras una mano de Valverde, y enseguida, con el tercer tanto, en un
centro de Martínez desde la izquierda que el colombiano "Teo" Gutiérrez
definió con un anticipo en el primer poste.
Quedaba
más de media hora de juego por delante, pero el partido ya estaba
sentenciado, y desde entonces los oídos de todos en el Monumental
quedaron pendientes del duelo entre Aurich y Tigres, a tal punto que los
goles que significaban el 3-3 y el 4-3 para los mexicanos fueron tan
gritados como si fueran goles de River, que con el éxito mexicano se
aseguraba el pasaje.
En
una noche cargada de emociones, River pasó de estar eliminado a meterse
entre los 16 mejores en cuestión de minutos, con un triunfo convincente
y que nunca estuvo en riesgo, y sigue vivo en una Libertadores en la
que, con los duelos mano a mano, seguramente ofrecerá más capítulos para
el infarto.
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