Cinco años después el destino tenía deparado otro momento imborrable para la generación de oro del fútbol español, de nuevo Italia y unos penales, como en los cuartos de final de la Eurocopa 2008 el día que España se liberó y desató su época dorada, otro empate sin goles.
Con más sufrimiento por el perfecto planteamiento de Italia que se topó con Iker Casillas y acabó llorando su mala fortuna en suerte última, con Navas de héroe sentenciando una tanda de penales perfecta hasta el fallo del central Bonucci.
Aquellos cinco minutos iniciales de dominio español fueron más un espejismo que la tónica del primer tiempo, es cierto que "La Roja" manejó más el balón, pero fue Italia quien lo utilizó mejor, sobre todo con llegadas rápidas y profundas por las bandas.
Así, la "Azzurra"
generó ocho situaciones de gol que no pudo concretar, en parte a la
buena actuación de Iker Casillas, quien se mostró confiable ante los
disparos de Christian Maggio o Daniele De Rossi, aunque también pecó de
falta de puntería, tanto en los pies de Alberto Gilardino como en la
cabeza de Claudio Marchisio.
Cerca estuvo de pagar caro esa ineficacia sobre el final, cuando Fernando Torres
se armó un hueco dentro del área pero remató afuera, de esta forma, el
campeón mundial llegó al descanso sin mover el marcador por primera vez en
el torneo.
Una mala temporada, meses sin jugar, no borran de la memoria de Casillas sus momentos de brillantez, los campeones del mundo y Europa se tambaleaban pero nadie pudo dudar de
ellos, en su peor momento ante el único rival que le ha hecho sufrir.
España cumplió con su objetivo de bajar el ritmo de juego en el comienzo del complemento, incluso, merodeó el área rival y probó a Gianluigi Buffon por primera vez a través de un remate del ingresado Jesús Navas, que el arquero contuvo sin problemas.
Recién al promediar la etapa la "Azzurra" se reencontró con aquella verticalidad que tanto había complicado a España
en la primera mitad, empujándola a defenderse más cerca de su área de
lo que está habituada.
Si
bien Vicente del Bosque buscó variantes ofensivas con el ingreso de Juan
Mata, la jugada más clara le perteneció a Gerard Piqué, quien apareció
como nueve en un contragolpe pero remató el centro de Navas por encima
del larguero.
Tras el primer 0-0 en los últimos 20 partidos del torneo, España e Italia
entregaron un vibrante primer tiempo extra, a un remate de Giaccherini
en el poste le siguieron dos situaciones de Piqué y otra de Jordi Alba, no bajó la intensidad en el segundo, Mata marró
por poco, Buffon y el palo le negaron el grito a Xavi, el arquero volvió a lucirse ante Navas, el cansancio marcaba el bonito duelo de fuerzas, se levantó Italia por
momentos, a balón parado, con Pirlo como perfecto ejecutor, tras varios
intentos, Chiellini remató a la red. Pero fue España la que acabó
perdonando, una duda en la salida de Buffon la desaprovechó Pedro y
Piqué lanzó a las nubes un pase atrás de Navas...y llegaban los penales.
Candreva desató una tanda perfecta ejecutando a lo Panenka, ningún
lanzador fallaba, los nervios se desataban, tras seis aciertos el
central Bonucci disparó a las nubes, era la hora de Navas y no falló,
España estaba en una nueva final y en el Maracaná, con un día menos de
descanso y tras un esfuerzo inhumano, el factor fortuna volvió a estar de
su lado, ese mismo día, pero en Salvador, Italia disputará el partido por el tercer puesto frente a Uruguay.
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