El argentino River Plate derrotó 0-1 a Godoy Cruz en
Mendoza en el partido de ida por la
segunda fase de la Copa Sudamericana-2014. Germán Pezzella (92') anotó para River de cabeza sobre el palo
izquierdo sin que el arquero Sebastián Moyano del "Tomba", figura del
local en el segundo tiempo, pudiera hacer nada para impedir la caída de
su arco.
Godoy Cruz había tenido un muy buen primer tiempo pero no pudo
aguantarlo y metido en su arco y sin respuesta física terminó derrotado
en un partido que hubiera merecido el empate.
El equipo de Marcelo Gallardo no supo contrarrestar el esquema de
presión de los anfitriones y encendió las primeras alarmas, y es que al parecer sus rivales ya le "encontraron la vuelta" al lider del
campeonato de primera división.
Es que los "millonarios", si bien tuvieron la punta mellada por la
ausencia de Teófilo Gutiérrez, justamente el máximo goleador de ese
torneo de primera con seis tantos, tampoco generaron juego en la zona
media ante el aislamiento de Leonardo Pisculichi, en definitiva el único
creativo en serio que tiene además del juvenil Tomás Martínez, que sale
desde el banco y al que todavía le faltan muchas horas de vuelo.
Por eso River se prodigó más en pos de plasmar
su idea, mientras que el local redujo aún más la de por sí poca audacia
exhibida en el período inicial.
Pero ante la falta de fútbol y profundidad (tampoco funcionó Rodrigo
Mora), la dinámica y el voluntarismo del uruguayo Carlos Sánchez
intentaron suplirlas sin éxito.
Sin las presencias del colombiano Teófilo Gutiérrez y del lesionado
Jonathan Maidana, River Plate pudo conseguir la diferencia de cara a la
revancha de esta serie que se disputará el próximo miércoles en el
estadio Monumental del barrio porteño de Núñez.
Godoy Cruz, que ya había sufrido una dura derrota por 0-4 ante este
mismo rival por el certamen local, pudo contener el gran momento de su
rival pero falló en la jugada final.
Sin el brillo de otros partidos, River sintió el esfuerzo físico y
durante la primera etapa tuvo enfrente un ordenado conjunto mendocino
que le impidió desplegar su habitual juego.
El ecuatoriano Jaime Ayoví y Rubén Ramírez exigieron a una defensa visitante que, pese los sofocones, respondió con solvencia.
En el complemento el uruguayo Carlos Sánchez y los juveniles
ingresados como Augusto Solari, Sebastián Driussi y Tomás Martínez
marcaron un aire fresco en la ofensiva millonaria.
La buena respuesta del portero Sebastián Moyano y la falta de
puntería parecía destinar el resultado a un empate con tanteador en
blanco.
Sin
embargo, practicamente en el final, un tiro libre ejecutado por el
mediocampista creativo Leonardo Pisculichi fue rematado de cabeza por el
zaguero Germán Pezzella para determinar la diferencia definitiva en el
marcador.
Al final, cuando todos se iban conformes a sus casas: los de Godoy
Cruz porque habían contenido al equipo que mejor juega hoy en día en
Argentina y los de River porque se llevaban un empate auspicioso de cara
a la revancha, llegó la injusticia.
Una jugada de pelota
parada, algo no habitual con lo que propone el "Muñeco" para su equipo,
llegó la victoria riverplatense de cabeza.
El ganador de esta serie de equipos argentinos tendrá como rival en
octavos de final al vencedor de la llave que disputarán Barcelona de
Ecuador y Libertad de Paraguay.
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