Inglaterra
sumó tres puntos en el Grupo H de la clasificación europea para la Copa
Mundial de Brasil, en un encuentro disputado en Wembley en
el que goleó con comodidad a una débil Moldavia (4-0).
La
victoria en casa sirve a los de Roy Hodgson para recuperar el liderato
de su liguilla, empatados a 15 puntos con Montenegro, que hoy no pudo
pasar del empate a uno ante Polonia.
El primer gol de la noche lo marcó el capitán, el medio del Liverpool Steven Gerrard (12'), que se encargó de asestar el primer golpe a un rival que ocupa el puesto
número 123 en el ránking de la FIFA y que se mostraba nervioso sobre el
césped del legendario estadio londinense.
El centrocampista "red"
aprovechó la ocasión para acabar con una sequía de 18 partidos con la
selección, gracias a un pase de Lampard desde una esquina del área rival
que le habilitó para disparar un balón raso, ajustado al palo, que
sorprendió a contrapie al guardameta moldavo, Stanislav Namasco.
Con los locales ya por delante en el marcador, las gradas de Wembley se
entregaron a un partido que no se les podía escapar de las manos y
celebraron poco después un nuevo tanto de Rickie Lambert (26'), que se ha
erigido en uno de los héroes del conjunto de los Tres Leones en los
últimos tiempos.
El delantero del Southampton firmó su segundo gol con Inglaterra
en su segundo partido como internacional gracias, por un lado; a su
olfato para estar en el área pequeña en el momento preciso, y por otro a
la incapacidad de la defensa moldava para despejar el balón.
Tras una sucesión de malentendidos entre los jugadores de la última línea de Moldavia, Lambert solo tuvo que meter la cabeza para dejar el balón en la red.
El tercero se lo apuntó Danny Welbeck (45'),
que solo necesitó rozar ligeramente el balón en la zona media del área
para controlar un largo pase desde el medio campo y dejar clavado en la
hierba al portero moldavo, que calculó mal la trayectoria del pase y no
opuso resistencia al atacante inglés.
Inspirado,
Welbeck se aseguró el doblete nada más comenzar la segunda parte (50')
, con
otra jugada personal en la que recogió un pase cruzado en el interior
del área y elevó con inteligencia el balón con la puntera para dejar
sentado a Namasco en el césped frente a su portería.
Con el partido decidido, sin que Moldavia
hubiera ensayado un solo disparo entre los tres palos a un cuarto de
hora para el final, los ingleses parecían guardar fuerzas para el más
exigente duelo del próximo martes en Ucrania.
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