Sin tiempo para la reacción, el capitán Ivica Vrdoljak perdió un balón de forma incomprensible en la medular que sirvió para que Lucian Filip no desaprovechase el regalo y jugase con Piovaccari, autor del 1-0 en la ida, el delantero italiano recortó a Dossa Junior, que se pasó de frenada al intentar cortar el esférico, y definió sin titubear como buen ariete de área, el Legia en ese instante necesitaba tres tantos para remontar el play-off y unirse al bombo de la UEFA Champions League.
En busca de la remontada, el Legia no tardó en reaccionar, la subida de Jakub Wawrzyniak acabó en un centro con la zurda que iba con música y Radovic la cabeceó para el 1-2 en el minuto 27, lo que parecía ser el inicio de una noche de ensueño para el Legia, que buscaba retornar a la máxima competición continental 18 años después, no se tiñó de los colores blanco y negro que viste la escuadra polaca.
Pese a dominar el esférico, el Legia tiró cuatro veces a puerta, por las diez de su rival, y ese aspecto fue un alivio para el Steaua, que pese a ello tuvo que sufrir a última hora con el 2-2 de Rzeźniczak pasados cuatro minutos del tiempo de descuento.
Pero Pedro Proenca dictaminó el final de la eliminatoria segundos después y los rumanos lograban el objetivo que empezaron a labrarse en la segunda ronda de clasificación de la UEFA Champions League. Tres eliminatorias después, el Steaua ya puede decir que jugará la fase de grupos de la mejor competición de clubes, el Legia lo hará en la UEFA Europa League.
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