
El combinado escandinavo plantó cara durante todo el encuentro, pero Italia dió un paso al frente gracias a la gran calidad de sus hombres, tanto en defensa como en ataque, donde Mattia Destro fue de la partida y protagonizó algunas de las mejores jugadas del choque.
No resultó extraño que la mayoría de las ocasiones corrieran a cargo de Italia, Nicola Sansone probó fortuna con dos peligrosos disparos y pasada la media hora fue Fausto Rossi el que lo intentó desde la frontal antes de que un defensa noruego desviase el esférico a saque de esquina, instantes después un cabezazo del omnipresente Caldirola se encontró con la espléndida estirada del portero Arild Ostbo, que en plena avalancha transalpina salvó a los suyos con intervenciones de mérito.
Tras el descanso, Destro siguió liderando el ataque italiano, aunque el delantero de la Roma no tuvo el mejor de sus días en la definición, en el minuto 61 el italiano cogió la espalda de los centrales y se dispuso de un mano a mano para estrenar el marcador, pero regateó al portero y se quedó sin ángulo para materializar la jugada, Noruega no se pareció a la de las dos últimas jornadas y sus mejores ofensivos, como Marcus Pedersen o Jo Inge Berget, estuvieron bien controlados por la zaga italiana, su mejor ocasión llegó con un violento lanzamiento de falta de Vegar Hedenstad que estrelló en el larguero en el 65'.
No fue hasta el último tramo cuando ambos equipos lograron mover el marcador, los noruegos acariciaron el primer puesto con un lanzamiento de penal transformado por Strandberg con el tiempo cumplido (90'), pero en el 94', Bertolacci se aprovechó de una confusa jugada en el área para reestablecer las tablas con un precioso gesto técnico y devolver a Italia al frente del grupo, ambas estarán en las semifinales del Europeo y una de ellas será el rival de España.
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