NÁPOLI SE APROVECHA DE UN INTER HERIDO

En el último partido de la fecha 35 del campeonato italiano de fútbol, disputado en el estadio San Paolo, Nápoli venció a Inter por 3 a 1, el uruguayo Edinson Cavani anotó los tres tantos de su equipo (3', pen. 33' y78'), Ricardo Alvarez, también desde los once pasos, había marcado el gol del temporáneo empate (23').
Con este resultado, Nápoli suma 72 puntos y se consolida en la segunda posición, que le vale el acceso directo a la próxima Champions League, Inter, por su parte, sigue teniendo 53 unidades y se cayó hasta la octava plaza.
Nápoli se puso arriba cuando Pandev aguantó un balón en los tres cuartos de cancha y metió el cuchillazo vertical para el ingreso de Cavani, el uruguayo, en el medio de Ranocchia y Chivu, controló de derecha y con el mismo pie la mandó a guardar al primer palo, inatajable. Inter, a pesar de la emergencia, no jugó mal pero, obviamente, carecía de peso ofensivo, el remate más peligroso fue de Pereira, parado en la medialuna en posición de "nueve", control y media vuelta de zurda apenas desviada.
Pero el referí Giannoccaro, de floja labor, consideró que el toque casi impercetible de Zúñiga contra Alvarez era merecedor de un penal, que el propio volante argentino se encargó de transformar en gol, venciendo el esfuerzo del arquero De Sanctis, que la tocó pero no pudo sacarla.
Nápoli pareció sentir el golpe del empate, pero el árbitro niveló todo con un "regalo" desde los once pasos para el Nápoli, de cualquier manera,  Cavani transformó el regalo en el 2 a 1 y también en su gol número 100 con la camiseta de Nápoli, logro histórico y aún más extraordinario porque conseguido en apenas tres temporadas.
En el complemento, con el ingreso de Cambiasso, Inter tuvo más la pelota, pero sin saber exactamente que hacer con ella, Nápoli, en cambio, se paró de contra y esperó su momento, que puntualmente llegó sobre la media hora de la segunda etapa.
En efecto, Cavani comenzó una contra rápida, realmente de manual, en la mitad de la cancha, abrió por izquierda hacia Pandev y picó por el carril opuesto, para ir a recibir el centro rasante y cruzado del compañero y vencer por tercera vez al pobre (e inculpable) Handanovic.
Inter terminó con varios juveniles en la cancha, como si Stramaccioni quisiera recordarles a todos, comenzando por sus dirigentes, la tremenda seguidilla de problemas y lesiones que le impidieron trabajar de manera normal.
Nápoli dió otra demostración de fuerza y madurez, todos dicen que Cavani se irá y parece realmente una lástima porque, con algún retoque, este equipo parace poder repetir la fantástica campaña en Champions League de hace dos años atrás.