CHIEVO SACA EMPATE EN BÉRGAMO

Atalanta y Chievo empataron (2-2) en Bérgamo, en el estadio Atleti Azzurri d'Italia, en uno de los enfrentamientos de la trigésimo octava y última fecha del campeonato.
Guglielmo Stendardo (8') y Luigi Giorgi (84') anotaron para el local, poniendo dos veces en ventaja a su equipo, pero ambas veces la visita recuperó con tantos de Cyril Thereau (76' y 90'), la figura de hoy.
De esta manera los azul y oro se pusieron undécimos, posición que por ahora ocupan en soledad con 45 puntos, mientras que los muchachos de Colantuono se quedaron decimoquintos, con 40 unidades.

Los negroazules tuvieron la suerte de pasar rápidamente en ventaja gracias a un yerro de la defensa rival, que en jugada de tiro de esquina terminó por regalarle el esférico a Stendardo, quien tuvo penas que tocarlo para meter el 1 a 0.
Ese gol tempranero golpeó a Chievo, que no supo reaccionar ni con coraje ni con ideas y así terminó por concederle la gestión del partido al local, que se mostró con peligro en más de una ocasión, en particular con un gran disparo de Carmona que Squizzi sacó al córner con una gran atajada.
En el complemento la visita se mostró un poco más audaz y algún peligro lo encontró, sin pero lograr calentar los guantes de Polito, quien de todas maneras no hubiese podido hacer nada cuando un sablazo de Sardo salió rozando el cruce de los palos.
Atalanta tuvo otras dos chances increíbles, pero no logró destrabar el marcador, en una ocasión por culpa de un off-side por el cual le anularon un tanto a Livaja y, luego, por culpa de Denis, quien tenía tiempo y espacio para anotar, desde buena posición, pero dejó que la defensa rechazara su disparo.
Chievo sacó provecho de la primera verdadera chance creada: Stoian dibujó un gran pase largo y Thereau, cortando desde el centro hacia la izquierda, se escapó a sus marcadores y casi desde la línea del fondo le pegó fuerte con la zurda, encontrando un Polito desatento que no sólo no salió, sino que hasta se dejó pasar la pelota por abajo de las piernas.
El 1 a 1 le dió fuerzas nuevas a la visita, que salió al ataque a buscar el triunfo, pero de manera inesperada golpeó Giorgi, quien le pegó desde el límite y lo sorprendió a Squizzi con una trayectoria complicada y muy rara.
Parecía el tanto del triunfo casero, en cambio, en la última jugada del partido, ya al tercer minuto de descuento, en el desarrollo de un córner el balón le llegó a Thereau en el área y el francés aprovechó la situación para mandarla a guardar, firmar el primer empate visitante de su equipo en este torneo, anotar su onceavo tanto en el campeonato y evitar de cerrar el año con una caída.