En un partido espectacular y con un gol de Aritz Aduriz cuando apenas se llevaban 12 minutos, el Athletic y
Osasuna, disputaron un choque con ritmo infernal en el que Andrés Fernández,
portero visitante, impidió más goles locales, sobre todo a Oscar de
Marcos, y los palos evitaron hasta tres tantos del equipo navarro.
El
ariete donostiarra enganchó un espléndida volea baja a centro de Oscar
de Marcos que se coló junto al poste izquierdo de la meta de Andrés
Fernández (12')
Fue la única vez que el Athletic logró batir al
meta murciano, impresionante el resto del partido sobre todo a disparos
de De Marcos, que le puso a prueba en no menos de media docena de
ocasiones.
A Osasuna lo que le frenaron fueron los palos,
dos veces el larguero y una el mismo poste cerca del que entró el gol de
Aduriz. Un centro de Lamah que iba a remachar Armenteros y sendos
disparos en golpes francos directos de Lolo y Timor.
Con
estos tres puntos, el Athletic sale de puestos de descenso, de los que
se aleja a dos puntos. A cuatro ha dejado a Osasuna en la penúltima
plaza de la tabla y con dos de desventaja con respecto a la salvación.
Los "rojillos" siguen con pleno de derrotas en sus desplazamientos, cuatro,
en los que ha encajado siete goles sin marcar ninguno.
El encuentro cambió radicalmente con el primer gol del Athletic, un
tanto al más puro estilo Bielsa. Iraola abrió a la banda derecha para De
Marcos, que de primera centró hacia atrás al punto de penal, donde
Aduriz enganchó perfecta una fuerte volea que se coló junto al palo
izquierdo de la meta de Andrés Fernández.Como liberado por
el gol, el Athletic enlazó un cuarto de hora largo de fútbol espléndido
que a punto estuvo de darle nuevos beneficios.
Era tal la superioridad local en ese tramo que
Mendilibar se vio obligado a reajustar sus piezas y realizó dos cambios,
los de Puñal y Lamah por Annan y Sisi. Así, Nino cambió de banda y
Osasuna tapó mejor su flanco izquierdo en defensa.
Al regresar de vestuarios, De Marcos tuvo dos oportunidades seguidas en la
misma jugada, pero en ambas se topó de nuevo con Andrés Fernández.
Primero, tras un desmarque de ruptura por la derecha y después en un
tiro por la izquierda, a pase de Muniain.
De Marcos fue uno
de los hombres de una segunda mitad de locura, de continuo ida y
vuelta, un ritmo vertiginoso que iba al pelo al de Laguardia. Aunque le
superó Andrés Fernández, que malogró un sinfín de ocasiones rojiblancas.
Otra de De Marcos y una de Susaeta, las más destacadas.
Osasuna
también gozó de su oportunidad, pero Timor volvió a encontrarse con la
madera, en esa ocasión la del palo izquierdo de la portería de Iraizoz,
en el minuto 83.

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