El Milan ganó a domicilio 4-5 al Parma con goles de Giacomo Bonaventura (25'), del japonés Keisuke Honda (37'), un doblete del francés Jérémy Ménez (pen. 45' y 79') y del holandés Nigel Jong (68').
El Parma descontó con Antonio Cassano (27'), el brasileño
Felipe (51'), Alessandro Lucarelli (73') y un autogol de Mattia De Sciglio (89'), al
tratar de pasarle el balón al arquero español Diego López.
López sufrió un estiramiento en la jugada pero no pudo ser sustituido
porque el técnico Filippo Inzaghi había realizado los tres cambios
reglamentarios.
Milan jugó la última media hora con un hombre menos
tras la expulsión de Daniele Bonera por doble amonestación, mientras que
el Parma sufrió la expulsión de Felipe a los 77'.
El delantero español Fernando Torres no pudo debutar con los
rossoneri porque el sábado sufrió un esguince en su tobillo izquierdo en
el entrenamiento del equipo.
Un festival goleador iniciado por el italiano Giacomo Bonaventura, que
puso el 0-1, la ventaja milanista duró apenas dos
minutos, tiempo que precisó el veterano Antonio Cassano para batir de
cabeza al meta español Diego López y devolver el empate al marcador.
Con
ambos equipos más en busca de la meta rival que la propia, el japonés
Honda y el francés Jeremy Menez pusieron al
Milan con un favorable 1-3 al descanso.
El partido estaba en manos
del Milan, pero se lo complicó con poca atención defensiva, lo que
permitió al brasileño Felipe acortar distancias. Apenas dieciocho
minutos después, el holandés Nigel de Jong devolvió los dos goles de
ventaja al Milan en lo que parecía cerrar el partido. No fue así,
Lucarelli de cabeza puso pronto el 3-4 y devolvió las ilusiones a
su equipo. Felipe, no obstante, cinco minutos después, dejó a su
equipo con diez tras ver su segunda tarjeta amarilla y un minuto
después, Menez protagonizó el gol de la jornada: se aprovechó en la
línea de fondo de un erróneo pase, eludió al portero con un toque que
dejó el balón paseándose a un metro de la línea de meta y, cuando
parecía se le iba a escapar, mató de tacón. Excelente ejecución.
Del
"gol arte" de la jornada se pasó, en diez minutos, al "gol tonto" del
partido: De Sciglio cede desde la zona lateral izquierda en mitad de su
campo hacía Diego López, quien se atasca, no acierta a despejar, y ve
como el balón entra en su portería. Era el 4-5, pero apenas
quedaba ya tiempo para más sustos. El Milan, en un partido loco, se llevaba los tres puntos y se sitúa en lo más alto, junto al Juventus Turín y Roma.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario