AMÉRICA RESPIRA

En partido de escuadras necesitadas de victorias, América le sacó los tres puntos a Monterrey de su casa con marcador de 1-2 que se definió en la recta final del encuentro.
Monterrey buscaba seguir por la senda de la victoria y América romper la racha negativa de tres derrotas consecutivas y con el objetivo de mantenerse en zona de clasificación. Pocas aproximaciones de peligro en el primer tiempo en ambas porterías, un juego intenso en la media cancha, todo parecía indicar que el empate reinaría en los primeros 45 minutos, sin embargo en un tiro de esquina que cobra Osvaldo Martínez, dentro del área Luis Gabriel Rey peina la pelota para que cerrara la pinza Eric Pimentel (35') para poner el 0-1 que sentenciaría la primera parte.
Ya en el segundo tiempo América se creció y generó numerosas jugadas de peligro en las cuales Jonathan Orozco portero de Monterrey se alzó como héroe, cuatro oportunidades claras que el arquero regio contuvo para mantener las esperanzas de su equipo.
Wilson Morelo (81') se encontró con un rebote y aprovechó de buena forma para poner el empate en el marcador pero cuando parecía que el local vivía su mejor momento, Paul Aguilar generó una gran jugada por la banda derecha y Rubens Sambueza (43') definió el partido. Después de la anotación azulcrema hubo algunas jugadas de peligro para Rayados pero al final el marcador fue en favor de los capitalinos.
Irónicamente el héroe del encuentro estaba posicionado en la portería del equipo que fue derrotado, con un temple de acero, Jonathan Orozco firme salvó en cuatro ocasiones claras a su equipo, aunque no pudo hacer más para rescatar el marcador.
En general el equipo local no supo aprovechar su momento tras el empate y descuidó la zona defensiva en la búsqueda de la victoria.
Monterrey mostró buen fútbol, generó opciones pero fue débil en la marca y de ahí se desencadenó el triunfo el rival. Rayados tendrá que trabajar más en el manejo de los partidos, pues por momentos parecen superiores pero signe sin reflejarlo en el marcador.
Después de tres derrotas consecutivas, América mostró lo suficiente para llevarse la victoria, en esta ocasión los cambios si lograron revolucionar el encuentro y Mohamed recibió una bocanada de aire puro en su constante lucha por impulsar a las Águilas al fútbol que él pretende.